Hace poco tiempo que descubrí, así por
casualidad, a este artista. Fue en una portada para un libro de relatos de H.P.
Lovecraft (a lo que puedo añadir que bien elegido) y tras esa primera llamada
de atención decidí indagar un poco más en su trabajo para ver que me ofrecía,
inmediatamente se quedó conmigo.
Todo radica en
gustos, por supuesto, pero fue el sobrecogimiento y la atmósfera que consigue
crear los que me enamoraron.
Tengo entendido que
él jamás buscó un significado a sus obras, las creaba por tanto, con una total
libertad dejando que fuese su subconsciente y su imaginación quienes guiasen
sus pasos. En ocasiones los artistas buscamos incansablemente el sentido a
nuestras trabajos por qué decidimos hacer eso, a que nos retrotrae esto otro, nos
inspiramos en eso de allá, como una obra de teatro en la que cuidamos
meticulosamente el guión dejando de lado la escenografía y sin embargo, no es
necesario hablar tanto para contar más.
Como bien dices, no es necesario hablar tanto para contar más y yo añadiría para sentir más,
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